En el mundo del marketing digital cada vez hay más profesionales que trabajan por su cuenta y desde casa (o desde donde quieran)
Cada uno tiene sus motivos para decidir trabajar de esta manera aunque la mayoría de ellos coinciden en que esta forma de trabajo les da más libertad.
Deciden sus horarios, eligen clientes, pueden trabajar allá donde se puedan llevar su portátil…
En mi caso, creo que esta modalidad de trabajo me permite ser más creativa.
Pero claro, estamos hablando de profesionales que ya están asentados y se ganan así la vida.
¿Cómo puedes llegar tú a lo mismo? ¿Qué tienes que hacer para trabajar de copywriter por tu cuenta?
Voy a darte algunos consejos basados en mi propia experiencia y en la de otros compañeros que he conocido en este camino.
¿Es mejor ser copywriter freelance o copywriter en agencia?
Según a quién le preguntes.
El copywriter que trabaja en una agencia quizá pueda trabajar desde casa o tenga que ir a las oficinas al menos algunos días al mes.
Es decir: no eliges los clientes, no eliges los proyectos…
Para mí, eso es un gran inconveniente porque me gusta trabajar con clientes con los que tenga buena sintonía y para proyectos en los que yo misma creo.
Todo eso lo puedes hacer como copywriter freelance, aunque hasta que no tengas unos ingresos más o menos estables no podrás permitirte el lujo de elegir.
Es la realidad y te la tengo que contar.
Eso sí, una vez que estás consolidado como copywriter freelance, no solo puedes elegir clientes sino también decidir cuánto vas a cobrar, qué horarios tienes, desde dónde trabajas…
No te voy a contar el rollo de siempre de trabajar desde la playa (yo si me voy a la playa es a tomar el sol y a nadar, no a trabajar, también te lo digo) pero sí que, en invierno, puedes trabajar en el sofá arropadito con una manta sin tener que pasar frío en la calle.
Ventajas y desventajas de trabajar como copywriter freelance
Ya te he dado algunas pistas un poco más arriba pero voy a contarte algunos detalles acerca del trabajo como copywriter freelance.
Ventajas
- Puedes elegir clientes y proyectos y, de la misma forma, dejar de trabajar para gente con la que no te sientas cómodo
- Tú decides tus tarifas
- Tienes libertad para organizar tu tiempo
- Si eres casero te va a encantar trabajar desde tu despacho, tu salón, ¡o tu bañera!
Desventajas
- No puedes bajar la guardia en cuanto a la captación de clientes
- Deberás encargarte de todos los aspectos de tu negocio o delegar en otros profesionales a los que tendrás que pagar
- Si no eres disciplinado y organizado… no saldrá bien
Ahora tú debes valorar si estás preparado para la vida del copywriter freelance, que ya te adelanto que es toda una aventura.
Olvídate de la rutina de la vida en una oficina, ¡es lo que me encanta de trabajar así!
Pero porque yo, Eva, soy así.
Quizá tú te sientas mejor en esa rutina y es perfectamente válido 🙂
Cómo conseguir tus primeros clientes y empezar a trabajar de copywriter
Si quieres trabajar con tu escritura persuasiva por cuenta ajena tienes dos vertientes.
La primera es probar suerte en una agencia de marketing, donde te adjudicarán diversos proyectos y clientes.
La segunda es buscar una empresa que cuente con sus propios copywriters o que tenga un departamento de marketing y publicidad.
De esta forma trabajarás en exclusiva para esa marca formando parte de sus diversas campañas, ya sea con email marketing, en redes sociales, haciendo las páginas de venta…
Literalmente, que no sientes el culo en ningún momento en lo que se refiere a la búsqueda de proyectos y clientes.
Por otro lado, para encontrar a tus propios clientes es imprescindible que tengas una buena presencia en redes sociales.
Y cuando digo buena presencia me refiero a que seas activo pero de una forma interesante, enriquecedora y diferencial.
Si quieres saber cuánto gana un copywriter te invito a leer este artículo.
Si te vas a limitar a programar publicaciones y a pasarte una vez a la semana, es mejor que ni las tengas.
Invierte en una buena página web donde apliques tu copy para venderte y utiliza el SEO para posicionarla en Google.
Y no te quedes esperando: muévete por LinkedIn, métete en grupos de Telegram, investiga en Facebook y Twitter…
Y si ves una web con un copy mejorable, escríbeles y ofrécete a cambiarlo: cuéntales qué harías, por qué y qué beneficios podrían conseguir.
Consejos para convertirte en un copywriter profesional
Una vez que ya tienes tus primeros clientes, ¡es hora de mantenerlos!
Y no solo eso: tienes que mantenerlos y conseguir que se conviertan en tus mejores embajadores. No renuncies al poder del boca a boca, es muy barato y tremendamente eficaz 😉
Para ello, todo el proceso tiene que ser impecable.
Y cuando hablo de todo el proceso, me refiero desde el momento en el que tienes un primer contacto con clientes potenciales.
Te lo explico.
Ten un portfolio
“Pero, Eva, si aún no he trabajado como copywriter, ¿cómo quieres que tenga un porfolio?”
Shh, tranquilo, lo sé.
¿Recuerdas lo que te comentaba antes de hacer propuestas de mejora de contenidos? Puedes hacer algo así.
Si sabes cuál es la web del cliente enséñale una muestra de algunos de los cambios que harías.
Si no la sabes o aún no la tiene, elige una web de los competidores y realiza la misma acción (aquí se puede picar, querrá que se lo hagas a él, no a la competencia 😛 )
Pásale un formulario
No te haces a la idea del tiempo que te va a ahorrar este formulario.
Pásaselo antes de reunirlos y en él pon preguntas acerca de su negocio, sus expectativas, su cliente ideal…
Propuesta de proyecto
No te limites a soltarle una charla con tus ideas para hacerle ganar dinero con tus textos.
Prepara una presentación profesional y clara que, a su vez, te sirva como guion de venta para tener las ideas claras durante tu exposición.
Entrégale después un documento con toda la información resumida para que pueda pensárselo o para que lo comparta con otros socios de su empresa (aunque lo idea es que te diga que sí en ese mismo momento, claro)
Calendario y plazos
Junto con tu propuesta adjunta un calendario en el que detalles cómo vas a trabajar y los plazos que puedes darle al cliente.
Por supuesto tendrás que ajustarlo con él en caso de que le pueda coincidir con otros proyectos pero lo ideal es que te sirva a ti para organizar tu trabajo y hacer entregas puntuales.
Estar organizado para cumplirla, mucho más.
Revisión de tus textos
Revisa siempre los contenidos.
Eres un redactor creativo pero eso no quiere decir que no te puedas equivocar y tener alguna errata en ese correo electrónico o en la página de venta de tu cliente.
Y no solo se trata de errores ortotipográficos sino de frases que de repente ya no suenan tan persuasivas o palabras que no expresan bien lo que quieres.
Por eso, en tu calendario de trabajo, añade siempre tiempo para revisar los contenidos antes de entregarlos.
Es algo que no todos los cursos de copywriting mencionan pero que yo te recomiendo hacer por propia experiencia 🙂
La factura
Es difícil entregar la factura a tu primer cliente: no sabes si lo has hecho bien, si estás cobrando lo que deberías (te explico cuánto cobra un copywriter), si es el momento de entregarle la factura…
Sea como sea, asegúrate de dejar clara la tarifa antes de empezar a trabajar para evitar problemas, cambios y desagradables regateos.
De hecho, por estas cosas los contratos son habituales en el mundo del copywriting ya que tienes un documento al que aferrarte si el cliente pone las cosas difíciles.
De todas formas, no te asustes, la mayoría de los clientes suelen ser personas razonables y normales.
Como ves, trabajar de copywriter es todo un reto.
Tendrás que perseverar mucho, en especial al principio, pero no es un imposible.
Cuando empiezas a tener tus primeros clientes y las cosas salen bien, te animas un montón, sacas más fuerza y te cuesta menos luchar.
Cuéntame en comentarios si tienes más dudas o cómo has conseguido tú trabajar de copywriter.